Buddha with cat

Todos los gatos incluso los dóciles los mansos los más sosegados sueltan el zarpazo. Lo hacen siempre sin razón y sin causa justa Del pecho les nace su genealogía de tigre enterrado De fiera domada a fuerza encarcelada sin permiso La garra ha de caer directo en la cara en medio del ojo rasgando todo el rostro. La garra purulenta de tetános, hepatitis y rabia rasga machaca mutila Es entonces deber del que enfrenta adoptar el papel del buda zen que logró apagar el tigre en su posición eterna de muerte dormida